botas niños y niñas

Botas para niños y niñas: consejos para acertar al elegirlas

No sé si a vosotras os pasó, pero cuando tuve a mi niño, una de las cosas que me preocupaba más era elegir el calzado adecuado. Cuando son pequeñitos, parece bastante evidente cómo elegirlo, ya que hay marcas especializadas en hacer zapatos para niños y niñas pequeños.

Pero cuando crecen un poco más, y ya tienen ellos opinión, ya quieren elegir a su gusto, y además saben expresar lo que es cómodo y lo que no, la cosa se complica un poco… un poco bastante. Coordinar sus gustos con lo que encuentras disponible ya es complicado, pero si encima no tienes claro el tipo de calzado que deben usar… la cosa se complica mucho. Y cuando se trata de botas para niña o niño, ni te cuento, porque es tipo de calzado que puede ser más rígido, y también más caro, con lo que corremos el riesgo de equivocarnos y que luego no las quieran poner… o peor, que no las puedan poner, porque no son adecuadas.

Para facilitarte un poco la vida, te voy a dar algunos consejos que a mí me han servido a la hora de elegir botas para niño y mi niña. Estos son consejos son fruto del aprendizaje de los años: de un abuelo zapatero, que siempre nos hablaba de las calidades que debían tener los zapatos para cuidar de nuestros pies. De este blog, gracias al cual me llega muchísima información tanto de marcas como de expertos, lo cual me permite combinar muchas fuentes de información que me permite tener una opinión formada e informada. Y también de mi experiencia como madre, porque ya sabéis que una cosa es la teoría… y otra la práctica, y siempre, siempre, tenemos que escuchar al niño o niña que tenemos delante.

 

¿Cómo deben ser las botas para niños y niñas?

Ojo, no es un checklist a cumplir, sino una serie de recomendaciones a tener en cuenta cuando  vayáis a comprar calzado para vuestros hijos e hijas.

 

Atención a los materiales

En el calzado infantil es especialmente importante que vigilemos los materiales de que están hechos, pues sus pies necesitan transpirar, y además sucede que a muchos niños y niñas les sudan bastante, ¡es natural! Por eso debemos prestar atención a que los materiales cuiden de sus pies, para evitar que por falta de transpiración puedan surgir problemas.

 

Acertar con la talla

Una de las cosas que más nos preocupa es acertar con la talla, y es que a veces ellos no nos ayudan demasiado. Si probamos los zapatos, es importante que estén de pie, y que nos aseguramos de que tienen los dedos bien estirados, ya que a veces, para “ayudarnos”, encogen los dedos.

Si vamos a comprar los zapatos online, un truco que funciona muy bien es extraer una plantilla de unos zapatos que le sirvan, y poner su pie encima (de pie, importante), para ver por dónde caen sus dedos, si ya le va justo, o si por el contrario tiene la holgura suficiente. Podemos aprovechar incluso para marcar por dónde da su pie, y así medir en la plantilla y saber lo que le mide exactamente.

¿Cómo saber qué talla usa un niño o niña? Es muy fácil, aquella que se acerque lo máximo a la medida de su pie mas  5 o 6 mm. No, no te puedo dar una talla exacta, y esto es porque de unas marcas a otras hay diferencia de medida. El zapato del que sacaste la plantilla te puede servir como referencia aproximada de talla, si por ejemplo le quedaba justo, pues ya sabes que posiblemente necesitará una talla más que esa. Pero cuando vayas a elegir el producto, comprueba las medidas, y que el largo en cm que indican sea el adecuado para su tamaño de pie.

Por ejemplo: a mi pequeña le mide el pie 18.2cm, aproximadamente un 30., Así que cuando quiero comprar zapatos de niña para ella, compruebo que la talla 30 se corresponda con una medida de longitud entre 18.7 y 18.9 cm.  Si por ejemplo, resulta que el 30 indica 18.6, pues ya le pediría un 31. ¡Espero haberme explicado bien!

 

Que sean impermeables

Esto para mí es un imprescindible, porque aquí llueve muchísimo en verano. Y sucede que cada vez hay más materiales, y no todos son impermeables. Y yo no sé vosotras, pero yo prefiero que puedan poner el calzado siempre que quieran, que no tener que estar pendiente de que llueva o no… actualmente hay multitud de tratamientos posibles a aplicar al calzado como hidrofugados o válvulas tipo goretex que hacen que el calzado no se empape, ¡todo un invento!.

 

Que sean flexibles  

Los niños y niñas necesitan correr, jugar, saltar… un calzado excesivamente rígido les impide realizar su actividad habitual, e incluso impide el correcto desarrollo de sus pies. Y en el caso de las botas, por desgracia, es un factor que no siempre se cumple. Por eso es importante que vigilemos que el calzado que vayan a usar sea flexible, que permita que se pongan de puntillas, salten, corran, y hagan todo lo que es propio de su edad.

 

¡Espero que te hayan servido estos consejos!

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