Hoy por fin os voy a enseñar como quedó mi cocina con todos los complementos que tiene ikea para organizar las cocinas y poner #todoenorden. Tras dos semanas de lluvias y cielos grises que hacían imposible hacer fotos decentes, por fin hace dos días salió el sol, así que aproveché la ocasión para hacer un montón de fotos. ¿Te pasas a ver cómo quedó ordenada nuestra cocina?
Hace un par de semanas recibí en casa la invitación con la que toda ikea adicta sueña:
A ver a ver, espera. ¿Todo lo que quiera? ¿pasar el día más triste del año arrasando en ikea? ¿Os habéis vuelto locos? Se lo tuve que preguntar y todo, ¡no me lo podía creer! Y si, me podía llevar todo lo que quisiera, siempre y cuando figurara en la lista que me adjuntaban:
Me dio la risa floja y todo, os lo juro. Y es que sólo una semana antes estaba yo mirando mi cocina y preguntándome cómo iba a conseguir aprovecharla mejor, especialmente esa despensa tan maja y que tan desaprovechada teníamos. Os la presento:
Debo reconocer que saqué un par de cosas antes de hacer la foto; ahí tenía un par de cajas de cartón intentando poner orden, pero la verdad es que no se les daba demasiado bien. Por lo demás, estaba tan desaprovechada como parece; ya veis que tan sólo había unas cuantas baldas, pero el espacio que usábamos era muy poco, teniendo en cuenta que es un habitáculo de 1×1 metros.
Además, en la propia cocina teníamos otro espacio totalmente desaprovechado:
Esa esquina tan maja y tan vacía siempre me ha parecido un lugar estupendo para un mueble auxiliar, que añada espacio de almacenamiento -que falta nos hace- y nos aporte sitio para colocar la cafetera, o el microondas, o la panificadora… ¡algo! porque los tengo sobre la encimera, comiéndome espacio y molestando.
Ya os podéis imaginar que con estos dos desastres en la cocina y una propuesta tan indecente por parte de ikea no tardé ni medio segundo en contestarles que contaran conmigo, que iría encantada 😉
Poniendo orden en la cocina
Lo primero que hice fue poner orden en mi propia cabeza; y es que una es alumna aventajada de la escuela de la decoración, así que tenía clarísimo que lo primero era hacerme las preguntas adecuadas:
- ¿Qué necesito guardar?
- ¿Dónde lo quiero tener?
- ¿Cómo quiero que sean los espacios?
Lo que yo necesitaba era aprovechar mejor el espacio disponible. En la despensa necesitaba, además, tenerla bien organizada, pues en ella quería guardar la mayor parte de alimentos que no necesitan nevera, y hacerlo con cierto orden, visible y accesible, de forma que me resultara fácil encontrar cada cosa. Este mismo problema lo tenía también en alguno de los armarios, aquellos en los que guardo los alimentos de uso más frecuente al cocinar.
Respecto a la esquina de la ventana, mi idea era obtener una superficie extra donde poder poner el microondas, con espacio para almacenar y así poder poner los cubiertos de los niños a su alcance. Me gustaría también poder poner comida (especialmente fruta) de modo que pudieran cogerla cuando les apeteciera. Me encantó la entrada sobre ambientes preparados Montessori en la cocina de Tigriteando, y era la oportunidad de llevarlo a cabo. Curiosamente, sin tener ni idea de Montessori, había dado mis primeros pasos en ese sentido con mi niño mayor, poniendo su cubertería a su alcance dentro de un mueble bajo; sencillamente pensé que sería bueno para él tener accesible su propio menaje. Pero al estar dentro de un armario con puerta no me acababa de convencer, así que esta era la oportunidad para hacerlo bien. Ikea, por cierto, también va en esta misma línea, de facilitar a los niños acceder a todo y participar en la cocina. ¡Ya se nota en lo que diseñan!
Con todo esto en la cabeza y la lista de la compra que me facilitó ikea, tuve claro en seguida que había 2 elementos que serían imprescindibles: un carrito FÖRHÖJA y una o dos estanterías IVAR. Además me parecía que un carrito RÄSKOG sería el complemento perfecto para nuestro ambiente preparado para los peques. Ya sólo quedaba tomar medidas, calcular qué complementos encajarían, cuáles usaría en la despensa, cuales en armarios, cuales en los carros… ¡acabé con la cabeza como un bombo!
El momento recorrer ikea recogiendo lo que quería, alegremente, fue total y absolutamente genial. Acabé agotada, pero francamente lo repetiría mil veces. ¡Muchas gracias ikea por semejante regalazo! Y que viva el #bluemonday 😉
Nuestros indispensables para poner #todoenorden
Obviamente no os voy a desgranar toda la lista completa, porque sería una locura, pero si que os voy a contar a grandes rasgos qué elegí y por qué lo hice.
Tras muchas medidas y dudas, elegimos para la despensa una estantería IVAR. Mi idea inicial era poner dos, pero hay unos tubos a ras de suelo en dos paredes que se comen un montón de espacio, así que sólo cabe una de 90×50 cm y además separada de ambas paredes. Aunque esto nos hace desperdiciar bastante espacio, aún ganamos mucho con respecto a la organización que teníamos. Para organizar cada balda trajimos casi todos los tipos de botes que nos ofrecían en la lista, pues ya sabéis que cada uno tiene su utilidad 😉
Montar la IVAR no tuvo la más mínima complicación; debo decir que no hice ni una foto porque no me dio ni tiempo, cuando me dí cuenta mi chico ya la había montado, y ya nos pusimos manos a la obra colocándolo todo.
¡Que maravilla tenerlo todo tan bien organizado! Y el tamaño de las vaviera las hace muy cómodas para sacarlas con todo su contenido si fuera necesario.
Como tenemos espacio suficiente pudimos sacar algunos platos que no usamos habitualmente, y así liberamos un poco el armario de los platos, que estaba el pobre demasiado lleno entre platos y fuentes. También en la parte alta de la estantería guardamos las ollas que no usamos frecuentemente, y una caja con vajillas en desuso.
Las cajas VARIERA son sin duda el gran acierto; cuando las vi todas juntas pensé que quizás se me había ido un poco la cabeza, pero en cuanto me puse a ordenar me di cuenta de que para nada, resultan tan prácticas que en seguida las teníamos repartidas; sin duda ikea sabe bien cómo organizar cocinas, todos los accesorios variera son un acierto pero las cajas facilitan muchísimo mantener la cocina ordenada. Tanto es así que en nuestra próxima visita a ikea compraremos más 😉
Para nosotros es importante tener separados los productos sin gluten, para poder evitar tanto confusiones como contaminaciones; por eso además de tenerlos todos juntos, a aquellos que están en botes sin sus envases originales decidimos ponerles una etiqueta dorada. De este modo resulta muy fácil identificarlos visualmente, tanto para nosotros como para mi niño.
Los cubos PLUGGIS, por la forma en que se pueden colocar uno encima de otro, son PERFECTOS para solucionar un problema que me venía atacando desde que tengo mi propio piso: cómo organizar los tuppers. No es ninguna tontería, siempre acaban las tapas despistadas, ocupan un montón, en fin es un poco desastre. Ahora en mis pluggis tengo en el cubo de abajo las bases y en el de arriba las tapas. ¡Y caben todos! ¡Problema solucionado por fin!
Y el mismo sistema me viene genial para almacenar patatas y cebollas, y como veis en la foto se accede a ambos perfectamente.
Con estos complementos resulta mucho más fácil poner en orden las cocinas, y resultan especialmente cómodos para para las organizar cocinas pequeñas (que ahora son la mayoría); resultan muy prácticos porque aprovechan muy bien todo el espacio, e incluso te permiten redistribuir los estantes y añadir alguno más, y así aprovechas mejor aún los armarios.
Los botes KORKEN vienen muy bien para guardar hierbas aromáticas, y también para mermeladas. ¡Este fin de semana me pongo con ellas! Y los cajones variera para especias, ¡qué comodidad! Cada vez que quería coger un bote acababa quitando la mitad, así saco el cajón y de un vistazo encuentro la que necesito. Mucho mejor 😀
Además decidimos traer una segunda IVAR de 30 cm de fondo y hacer un espacio de reciclaje, en la terraza, con zonas para almacenar papel, plásticos, vidrio… organizándolo con los cubos PLUGGIS y bolsas DIMPA. Lamentablemente no os puedo enseñar el resultado porque nos confundimos al coger las baldas y no son del tamaño adecuado, así que tendréis que esperar a que volvamos a ikea -en unos días- para coger las correctas y poder montarlo.
Para la esquina de la cocina sin duda el carro FÖRHÖJA era lo que necesitabamos. Tiene espacio suficiente para colocar el microondas, dos cajones que nos vienen muy bien, y la altura de sus dos baldas es la idónea para que los peques puedan coger su menaje.
Junto a los cubiertos pusimos una pequeña jarra con agua, pero la peque empezó a tomar un tratamiento para su problemilla de retención de heces y tenemos que controlar lo que bebe, así que tuvimos que quitarla temporalmente. Igualmente, cuando tiene sed va y coge un vaso, y luego viene y nos pide: AGUA.
El carrito RÄSKOG por su parte tiene la estructura perfecta para usarlo de frutero; gracias a ello tienen a su alcance fruta y algunos alimentos, y además al ser móvil la coloco delante de la puerta de la terraza, aprovechando así ese hueco, con lo que no lo tengo en medio de la cocina, y cuando quiero salir tan sólo tengo que moverlo. Nuestra idea era que tuvieran accesibles alimentos para desayunar y merendar, de modo que cogieran lo que más les apeteciera. Y debo deciros que está resultando la mar de bien, les encanta poder ver todo lo que hay disponible y decidir ellos mismos 😉
Como la pitufa lo mueve recoloca todo no quería poner botes de cristal a su alcance, así que los botes con tapa ikea 365 fueron los elegidos para completar el carro con pan, cereales y algunas galletas.
El mayor, que ya llega a casi todo -y a donde no llega manda recado- está encantado con este cambio, pues lo tiene todo más accesible, pero la más pequeña de la casa está especialmente contenta con esta nueva disposición, ya que desde muy pequeña le gusta repasar todo el menaje y servirse ella misma. Desde que empezó a hablar y señalar, cuando tiene sed o quiere comer algo te lleva a la cocina, y mediante gestos y señalando te hace saber lo que quiere tomar. ¡Menuda es ella! Ahora muchas cosas ya las puede hacer ella misma, y está encantada 🙂

Tan sólo tenemos un pequeño problemilla de entendimiento entre mi niña y yo, y es que se ve que tenemos conceptos distintos de cómo ordenar las cosas, ya que cada vez que coloco los cubiertos, ella los coge, y se dedica a meterlos uno a uno entre las rendijas de la balda… y luego se marcha, dejándolos todos allí. Y todos los días igual. ¡Así es imposible aburrirse!
La verdad es que llevaba un tiempo dándole vueltas a cambiar la cocina, ya que los muebles están en buen estado pero se ven un poco desactualizados, y con esto ya me ha acabado de picar el gusanillo. Ahora sólo falta decidir qué hacer: pintar los muebles, cambiar sólo los frentes o cambiarla completamente. ¡Se aceptan ideas!
ayayayayayay hiperventilando me tienes!! La escuela de decoracion?? Ikea?? Ay madre madre voy a informarme que no me lo quiero perder…
Y cuanto más te leo más te quiero!!! jajajaja. Sé que a partir de hoy no me pierdo nada nada de lo que publiques porque, por una parte me vas a ayudar un montón con mis inicios del blog desde «Ser blogger», y por otra todo lo que cuentes en tus post de «Una madre como tú» me va a interesar porque tenemos aficiones y gustos comunes.
Que envidia sana me has dado con lo de Ikea!!!! Pero que bien apañada has dejado tu cocina…así da gusto ver cada cosa en su sitio….y que vengan los terremotos arrasando…
Ha quedado preciosa
Que chulo el rincón de los niños, ¿podrías explicar cómo lo tenías en el armario? Me gustaría ponerlo a mis mellis.
¡Bienvenida Isabel! Te va a encantar la escuela de la decoración, es super útil ;D
La cocina veremos lo que dura jajajajajaj lo bueno es que así resulta mucho más fácil mantener todo en su sitio. Estoy intentando hacer lo mismo en toda la casa, a ver si lo consigo 😉 ¡Un besote!
¡Gracias linda!
Dentro del armario tenía un bote para los cubiertos, una bandeja para los platos y otra para los vasos; en el estante de abajo cereales y galletas en botes transparentes. No me gustaba porque quedaba todo bastante apretado, y tenían que andar abriendo y cerrando la puerta, y eso a veces provocaba pequeños accidentes. Ahora les resulta mucho más cómodo.
Llevaba tiempo buscando un frutero así! Las fotos que habia visto del carrito no eran concluyentes para comprarlo, pero me lo apunto para el siguiente paseito a Ikea… gracias 🙂