Piel atópica o alérgica: cómo cuidarla

Piel atópica o alérgica: cómo cuidarla

Leyendo hace unos días un artículo sobre la piel atópica en bebés caí en la cuenta de que os he hablado sobre mi alergia, pero no de cómo me cuido la piel. Se da el caso además de que mi mayor, como ya os conté años ha, tiene piel atópica. Y, aunque lleva un par de años sin apenas problemas (toca madera y mucha…), de vez en cuando tiene etapas en que la piel se le reseca, y nos toca volver a la rutina específica de cuidados.

Dermatitis atópica: cómo reconocerla

Quizás te estés preguntando… ¿y cómo sé si es mi caso? La piel atópica es una piel seca, descamada e irritable, y por normal general la reconocemos cuando da la cara con uno de sus brotes. Es entonces cuando aparecen los picores intensos, las placas rojas de eccema. Este tipo de reacciones son las que nos ponen sobre la pista, en todo caso ante cualquier sospecha debemos acudir al médico de cabecera que es quien puede diagnosticar.

Mi caso es un poco distinto, porque aunque mi piel es en general muy seca, no soy atópica sino alérgica. Cuando tengo brotes son de urticaria, que en esencia es bastante distinto, pero el resultado final es similar: una piel muy irritada y que pica a rabiar.  Y aunque la apariencia de ambas son distintas, los cuidados son similares.

Cuidados basicos: limpieza + hidratación – irritantes

El paso más básico e importante en este caso es usar productos de limpieza adecuados. Puede parecer obvio, pero cuando la piel está en brote (irritada), el usar un jabón o gel normal no hará más que empeorarla. Especialmente en las fases en que la piel está irritada, lo más recomendable es utilizar fórmulas específicas para pieles atópicas, que por normal general son sindet (sin jabones). No se aconsejan los baños por inmersión, o al menos no muy largos, ni con agua muy caliente.

Es necesario hidratar la piel a diario, con productos específicos. Si el que tenemos no nos funciona, o parece hacer menos efecto, ¡toca cambiar! No todas las pieles son iguales, y además se acostumbran a las cremas, es importante tenerlo en cuenta.

A mayores, debemos ser muy cuidadosas con los productos que van a entrar en contacto con la piel, como prendas de ropa, pero también cosméticos, jabones o suavizantes, no sólo los que usemos directamente, sino para lavar nuestra ropa. Esto lo vi muy claramente con mi mayor: tuve que usar detergente especial para bebés (sin suavizante) hasta casi los 5 años. En cuanto volvía al jabón normal o añadía suavizante, su piel empeoraba. Yo, cuando uso determinados productos, si tengo la piel mínimamente sensible me provocan brote. Me pasa por ejemplo con los autobronceadores: ya me he comido un par de reacciones en mi cara por usarlos, con lo que acabé descartándolos; en el resto del cuerpo no parece afectarme (y mis piernas pálidas lo agradecen).

Hubo un producto que usé mucho con mi mayor, porque le funcionaba francamente bien, y de hecho se la recomendé a mi  hermana (también atópica) con idéntico buen resultado: la loción de microplata de Multilind. Es un producto curioso, porque tiene un color grisáceo que te llama la atención cuando lo usas por primera vez. Pero lo cierto es que es altamente efectivo para calmar e hidratar la piel, recuerdo que con mi mayor cuando lo descubrimos marcó un antes y un después, hasta entonces nada de lo que habíamos probado le funcionaba, le pasaba incluso que cremas específicas para su piel le provocaban aún más picor. ¡Una locura!

Lo recordé a leer el artículo en Hello Papis, así que me animé a pedir la loción por si en verano hace algún amago de brote (le pasa a veces con la piscina), y para mí dos productos que no conocía: la crema facial y la crema palpebral (específica para los párpados).

loción piel atópica

Multilind: por qué me gusta tanto

Lo que más me gusta de esta línea es que no tienen ni parabenos, ni perfumes, ni corticoides, que como sabéis tienen bastantes efectos secundarios, y consiguen resultados notables. Es válido para niños y mayores, con lo que si en casa hay varios afectados (como es nuestro caso) no es necesario tener un producto para cada uno, de hecho estos productos se pueden usar en bebés.

Me ha llamado mucho la atención la crema palpebral, pues mi punto débil son precisamente los párpados: siempre es donde tengo más reacción, de hecho en los últimos brotes además de la irritación estoy teniendo bastante inflamación. Y, hasta ahora, no había encontrado ninguna crema para este problema que fuera específica para párpados.

No sé si alguna vez habéis tenido irritaciones en los párpados, el principal problema es que las cremas muchas veces pasan al ojo y producen rojez y picor, y de hecho las cremas con corticoides suelen indicar que no se usen en esa zona, de ahí mi alegría al encontrar un producto específico para ellos.

crema facial piel atópica

Como llevo una temporada con pequeños brotes la he ido probando, y la verdad que es fabulosa, ¡qué bueno haberla encontrado! La microplata, por cierto, la incorporan porque es un antiséptico de amplio espectro, de ahí la capacidad de calmar + curar de esta crema, y su color gris 😉

He visto que tienen más productos, como gel de bañochampú,  acondicionador… ya os iré contando si los voy probando, y si los probáis, ¡contadme!

¿Hay atópicos en tu familia?  ¿Me cuentas vuestros cuidados y productos favoritos?

2 comentarios en “Piel atópica o alérgica: cómo cuidarla”

  1. Mi hija es atópica y lo estamos pasando mal estos días porque le acaban de poner gafas y parche y el adhesivo del parche la está despellejando entera. Tiene que llevarlo cinco horas diarias y es imprescindible que sea adhesivo para evitar que haga trampa y use el ojo bueno, pero ponérselo y quitárselo es una pesadilla. Tiene el ojo muy vago y el oculista ya nos ha dicho que lo del parche va para largo porque al ver tan mal por ese ojo necesita ejercitarlo mucho, así que estoy buscando parches que le vayan bien para no terminar con la piel hecha polvo. La pobre llora cada vez que hay que quitar el parche, hasta pide seguir con él.

  2. Vanesa {Una madre como tú}

    Hola Emma, esto que cuentas me pasa a mí con algunos esparadrapos, no los aguanto ni un minuto, en seguida me empiezan a picar. Por lo general, los blancos tipo papel los tolero mejor. Quizás a tu hija le pase algo parecido, ¿has probado a hacerle tú el parche con esparadrapo? Puedes probar a ponerle varios trozos de esparadrapos distintos en el brazo, a ver si alguno lo lleva mejor, y quizás se lo puedas hacer con ese…

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