¡Segunda semana de mi reto personal contra los kilos extra! La semana empieza con control de peso, y ya os adelanto el resultado: 1 kg 100 gramos menos. Esta semana me ha resultado fácil porque ha sido una semanita muy movida, aunque el extra de estrés no tengo yo muy claro que sea bueno para nada 😉
Mis objetivos al hacer el plan entulinea
En la entrada anterior no os conté cuál es mi objetivo al seguir el plan entulinea. En realidad no tengo un objetivo, sino varios. El primero, que ya lo estoy consiguiendo, es cambiar mi autoimagen: empezar a verme bien. Mirarme al espejo y que me guste lo que veo. Eso al estar bajando de peso ya sucede por sí mismo, pero no quiero que sea algo vinculado a los kilos, sino a la aceptación. Me gusto tal y como soy, con los kilos que sea. Los kg no me definen 😉
Y para muestra, la foto de hoy: a cara lavada, bien ojerosa y sin filtros:
Ha sólo unos meses ni de coña os subiría una foto así, y hoy me he visto y he pensado… ¡que guapa!. Es increíble lo que hace nuestra cabeza, ¿verdad?
Además como madre me parece muy importante transmitir esto a mis hijos, en especial a mi hija: hay que cuidarse y llevar una dieta sana, pero no por pesar más kg has de sentirte mal, ni fea, ni tampoco dejar que nadie te haga sentir así. Sólo son kg, vienen y van; la persona que eres permanece inalterable.
El segundo objetivo son los kg que quiero bajar en primera instancia: 10 kg. Son un montón, pero si consigo mantener el ritmo de 1 kg por semana en Fin de Año estaré celebrando que ya me los he quitado de encima. ¡Sería la leche!
No obstante, no tengo un límite temporal para perderlos; sería genial celebrarlo en Fin de Año, pero me alegraré igualmente si lo celebro en marzo en el cumpleaños de mi mayor: lo importante es continuar con una buena dieta y haciendo ejercicio, el resto llegará por sí mismo.
Resumen de mi semana
Esta semana como os decía ha sido francamente fácil seguir el plan, mi único “tropezón” ha sido el fin de semana cuando mi padre ha hecho sus famosas carrilleras y de postre han sacado helados… por suerte antes de pensar siquiera en comerlos miré su puntuación… y casi me desmayo del susto. ¡Un minihelado, 9 puntos! Nunca lo hubiera pensado, ¡con lo pequeños que son! Se me quitaron las ganas al momento… Luego miré otro que había y eran sólo 4 puntos, así que me animé a tomarlo, ya iba con puntos de sobra por si acaso así que me pude permitir ese pequeño lujo 😉

Esta semana ha llovido un montón y me ha coincidido con los días que tenía previsto salir a andar así que me ha chafado un poco los planes, pero bueno iré pensando en un plan B porque aquí cuando toca invierno de llover llueve todos los días durante semanas… ¡se aceptan ideas para hacer en casa!
Enviadme vuestras preguntas
Durante esta semana habéis sido varias las que me habéis preguntando en privado o me habéis enviado mensajes preguntándome acerca del plan entulinea, de mi experiencia y cómo funciona. Os animo a todas las que tengáis dudas a que me escribáis, sin tapujos, os prometo que contestaré a todo 😉
Una de las preguntas me pareció muy significativa, así que la voy a compartir con vosotras.
Me preguntaba una chica si estaba hablando del plan porque entulinea me haya contactado, o por el contrario ya lo conocía.
Efectivamente, me contactó entulinea hace unas semanas para invitarme a probar el plan. Pero como ya os conté la semana pasada, yo ya hacía entulinea, lo conocí a través de una amiga, y comencé con muchas dudas pero porque tenía la impresión de que era lo que yo necesitaba: un plan de vida, no una dieta. Un plan sano, que no me obligaba a hacer comidas especiales ni restricciones, y que me permitía cocinar para toda la familia. Y al seguirlo me dí cuenta de que era justo lo que yo buscaba, que me permitía identificar muy claramente los errores que cometía, y que funcionaba.
Cuando me contactaron yo ya había comprobado todo esto, y ya tenía pensando comenzar a contaros mis avances en el blog. La diferencia es que yo pensaba esperar un poco más, para poder mostraros fotos en las que el cambio ya fuera evidente, y eso os sirviera de acicate para empezar. Al contactarme dudé si aceptar su propuesta, pero la verdad es que me pareció que sería para mí un extra de motivación, por la responsabilidad de hacerlo bien para mostraros mis avances, y cuando tienes tantos kg por delante, todo empujoncito viene bien. Y también pensé que, igual que a mí me había animado ver a otras haciendo el plan, que yo os contara mis progresos seguro, seguro, animaría a otras a comenzar. Y eso me decidió.
Si yo no hubiera visto resultados, no hubiera probado ya el plan, o no me pareciera un plan saludable ni aceptaría su propuesta ni hablaría de él en el blog. Este tema para mí es muy serio, y las que como yo tenéis una buena dosis de kilos extra y lleváis media vida peleando con ellos entenderéis por qué lo digo.
A por la siguiente semana
Yo ya estoy un kg más cerca de mi objetivo, esta segunda semana mi objetivo es comenzar una rutina de ejercicio, instaurar unos días fijos para hacerlo y cumplirlo a rajatabla. Mi idea es salir a andar 3 días a la semana, pero como os digo estoy buscando opciones para hacer en casa, por si llueve mucho y no puedo salir alguno de esos tres días. ¡Se aceptan ideas!
¿Cómo ha ido tu semana, me lo cuentas?
¡Ay! Esos puntos exagerados que se van en miniaturas fueron mi perdición. A mí, cuando casi me dio un parraque, fue al principio de empezar con el programa, porque fuimos a un Burger King y mi marido, sin consultarme nada, me pidió el menú de siempre con sus patatas fritas su Long Chicken y hasta helado de postre. ¡42 puntos de un plumazo! Todos los de ese día y casi el extra semanal completo gastados a lo tonto, en un suspiro. Con el tiempo te espabilas, y logras comer hasta en lugares de comida rápida sin que se te escapen los números.
¡Ánimo! Lo de los puntos me parece molón porque es una forma de ir controlando lo que se come.