Uno de los imprescindibles en mi casa siempre ha sido el roscón de reyes, nada como comenzar el día desayunando con algo tan rico… así que cuando comenzamos con la dieta sin gluten para mi peque no dudé en hacérselo yo misma, pues ya sabéis lo que pasa con los «precocinados» sin gluten, carísimos y la mayoría no pasan de «masticables».
Generalmente, cuando comparto recetas he hecho antes la versión sin gluten y también la versión con harina de trigo, pero en éste caso no es así, así que no os aconsejo intentar hacerla con harina de trigo; las recetas que he visto hacen masa de prefermento, por lo que mientras no lo pruebe os aconsejo buscar otra.. por ejemplo la de Kanela y limón se parece bastante y tiene muy buena pinta 😉
Ésta es una receta bastante fácil de hacer, aunque os aconsejo usar siempre amasadora (o thermomix, o panificadora), puesto que el amasado es importante, y a mano debe hacerse un poco difícil.
Respecto a las harinas usadas, además de proceli la receta original llevaba 100grs de harina de garbanzo, pero como a mí no me gusta el sabor que da a las recetas la sustituí. Os doy 3 opciones, según para que según vuestros propios gustos o las harinas que tengáis en casa podéis usar una u otra.
- 70 grs. de harina panificable adpan+ 30 grs. de harina de garbanzo (ojo, ¡que sea sin trazas de gluten!)
O 40 grs de harina beiker + 60 gsr de harina de trigo sarraceno
O directamente 100grs de harina de garbanzo
Ingredientes del roscón
400 grs. de harina Proceli
100 grs de mezcla de harinas (ver nota arriba)
2 sobre de levadura seca o 24 gr. de levadura fresca de panadería.
3 huevos grandes
180 ml. de leche.
160 gr. de mantequilla.
180 gr. de azúcar
2 cucharadas de vinagre
Ralladura de 1 naranja y 1 limón
2 cucharadas de agua de azahar
Para adornar, según sea costumbre o más os guste: Almendra laminada o picada, frutas escarchadas. También necesitaremos 1 huevo
Elaboración
Para no tener problemas con el levado, os aconsejo hacer el roscón en una habitación sin corrientes y más bien «caldeada», ni se os ocurra hacerlo en una cocina fría porque acabaréis desesperadas. También es importante tener los ingredientes a temperatura ambiente, así que sacadlos de la nevera con una antelación mínima de media hora.
Comenzamos troceando la mantequilla y batiéndola con el azucar hasta que se integran. Luego añadimos poco a poco la leche tibia, los huevos, las ralladuras, el vinagre y el agua de azharar. Mezclamos en un bol las harinas con la levadura, y añadimos a la mezcla. Lo dejaremos amasando unos 10 minutos.
Sin sacarlo del recipiente lo dejamos reposar durante media hora, y luego lo amasamos otros 10 minutos. Cubrimos con un paño y dejamos que leve hasta doblar tamaño, le llevará una hora aproximadamente. Yo para estos levados siempre meto la masa en el horno, así me evito corrientes que la estropeen. Si ponéis un vaso con agua caliente agiliza un poco el levado.
Cuando haya doblado el tamaño (más o menos), ponemos un papel encerado sobre la bandeja del horno y volcamos la masa. Para todo el proceso de darle forma iremos mojando las manos en agua, de este modo evitaremos que se nos pegue la masa, por lo que os aconsejo preparar un bol con agua caliente.
Marcamos un agujero en el centro, y con paciencia vamos separando la masa y estirándola, para darle la forma de roscón. No os de miedo dejarla muy fina y con agujero grande, la masa aún va a crecer, y como no le dejéis un agujero grande se cerrará. También aprovechamos para alisar toda la superficie con las manos. Una vez listo, la dejamos reposar de nuevo para que leve y doble su volumen.
Cuando esté listo, ya podemos adornarlo. Lo primero será batir un huevo y pintar toda la superficie. Luego podemos adornarlo con almendras, o con frutas confitadas, y también podemos mojar azucar en agua de azahar o zumo de naranja y colocar montoncitos de azucar por toda la superficie, aunque yo ésto prefiero hacerlo después de hornear.
Una vez listo, lo metemos en el horno frío, y lo encendemos a 180º. El tiempo de horneado será 40 minutos, aunque debemos vigilar que no se nos quede por arriba. Pasado ese tiempo, apagamos el horno y abrimos la puerta por arriba, para rebajar la temperatura del horno antes de sacarlo. Si vemos que se nos quema le ponemos papel albal por encima
Lo dejamos enfriar, y ahora según el gusto, lo podéis comer tal cual, o cortarlo por la mitad y rellenarlo de nata, crema pastelera… ¡según preferencias!
Y aquí tenéis mi roscón, cometí el error de echar azucar por encima antes de hornearlo, y ya veis el color negro que cogió… para mi gusto es mejor echarlo después:
No es más que una cuestión estética, porque lo que está quemado es el azúcar, no el roscón, con lo que le añade un gusto como a caramelo.
El roscón del año pasado, en cambio, tenía mejor color, y es que como hice antes una prueba pequeña, ví lo que sucedía con el azucar y no se lo eché antes de hornearlo:
¡Que pena que por mi mala memoria se me olvidara ese detalle!
Y ya si cortas el roscón al medio, lo rellenas de nata y luego lo adornas con azucar…
… te puedes morir de lo bueno que está 😉
¡A disfrutar del roscón! ¡Felices Reyes!
Si te ha gustado esta entrada o te ha resultado útil, ¡da 5 estrellas y COMPARTE porfa!
[ratings]
¡qué buena receta para celíacos! Es que quedarse sin roscón es un pecado…
En casa hacemos en de harina de trigo, y amaso a mano. Tampoco es para tanto, así que si os pasa como a mí, que soy anticacharros, se puede hacer a mano. ¡No os quedéis con las ganas!
Vaya, qué artista!!!! Me encantaría hacer uno pero tengo un horno supersonico (estropeado vaya jajajajajaja) que me quema todo en un abrir y cerrar de ojos…..o sea que cosas de estas imposible 🙁 Cambiarlo es proposito de año nuevo :))
Hola Orquidea, encontre tu blog leyendo ser padres, yo no soy madre, pero en abril comenzaremos a intentarlo, espero que no tardemos mucho, tu blog me ayuda en algunas dudas que tengo, espero poder leerte durante mucho tiempo 🙂
Me gustaria recibir por correo tus publicaciones si asi lo quieres tu tambien, pasare a leerte siempre que pueda! me estoy animando hacer un blog pero no lo tengo del todo claro, un abrazo!
Por cierto el roscon ese tiene una pinta genial! aunque yo ahora voy a intentar no comer dulces, pero algun dia lo provare!
Buenas noches
Mi nombre es Alejandro. Tenemos una niña celiaca y hemos intentado hacer tu roscon para que ella pudiera tomarlo. Por dos veces el intento. Me quedo fatal en ambas ocasiones. Pura piedra, no subió nada. Una vez mezcle los ingredientes, antes de dejarlo en reposo, como debe quedar la masa? Inicialmente me queda muy pastosa, imposible de trabajar con las manos (se pega todo). Termine añadiendo más harina de maíz y creo que debió ser el problema. Te agradecería algún consejo/ayuda
Muchas gracias por todo
¡Hola Alejandro! Vaya, pues siento mucho que no te haya salido el roscón, menudo chasco os habréis llevado 🙁
Lo que dices de que la masa queda muy pegajosa ya me extraña; algo pegajosa queda, pero se maneja bien mojando las manos. Si has añadido más harina seguramente ese sea el motivo de que quedara como una piedra.
¿Has usado las harinas indicadas? Supongo que ya sabrás que con las harinas sin gluten, cambiar la harina principal puede significar el desastre total… Además que no subiera me escama; ¿Estaría demasiado fría la cocina? ¿usaste los ingredientes tibios? ¿qué levadura utilizaste? Tenemos que conseguir ese roscón ;D
Si que es un pecado, y éste la verdad es que da la talla, ¡merece la pena hacerlo!
Cada año me pronpongo hacer un roscón «glutenero», tengo curiosidad por ver las diferencias, a ver si me animo… ¿De verdad lo amasas a mano? Venga va, probaré, ¡gracias por tu recomendación!
Besotesss
Pues para tu horno supersónico quizás sirva lo de meter la masa con el horno en frío. Te lo digo más que nada por si te apetece hacer un bizcocho o algo así… lo metes con el horno apagado, lo enciendes con la temperatura de esa receta, y lo dejas el tiempo que indica esa receta… pero 10 minutos antes empiezas a vigilarlo. Lo mismo te llevas una alegría y te reconcilias con tu horno 😉
¡Bienvenida Flordelis! Anímate con ese blog, y anímate ya, así podrás guardar todo lo que pienses y sientas ahora y durante el embarazo como lo que es: un tesoro. Y cuando lo hagas, ¡no se te olvide decirme la dirección!
Un besote guapa!
¡Espero que en Reyes te hayas permitido probarlo! Un poquito no hace daño 😉
Sí sí: me armo de paciencia y ¡¡¡hala!!! 😀
Si, si , vosotras seguir poniendo estas cosas que asi me va , ejem ejem.
besazos
OMG!! yo que este año me quedé con antojo, que comimos todos los dulces posibles pero roscón no! mare mía mare mía que pintaca, no sé yo si no me va a dar por hacerlo cualquier día de estos en los que supuestamente estoy ya a dieta jajaja
Besotes!!
Ya que no puedo comerlo… jajajajajaja
Puedes hacer la versión «bollitos de leche» con la misma masa pero haciendo menos cantidad, que son igual de ricos ijijijiji besotes!
Hola, qué tal?
El azúcar se debe poner antes de hornear y cuando y a esté lista la temperatura del horno. Es posible que se te quemara. o bien porque estuviera muy cerca de la bóveda del horno, o porque el azúcar estaba muy humedecido con el azahar. Si es esto último, que es lo que parece, se te hace caramelo y se quema. Yo suelo humedecer el azúcar unos días antes(porque me gusta que tenga sabor a azahar y lo humedezco bastante) y dejar que se seque en un bol abierto, moviéndolo de vez en cuando para que seque bien.(Tarda bastante, eh. Días) Queda todo el sabor y aroma en el azúcar y no corres el riesgo de que se queme. Si se apelmaza, basta con darle unos golpecitos y así poder repartirlo mejor por todo el roscón.
Saludos
Emma peláez