
Mamá a la carrera (dichosa no conciliación)
Diciembre se presentó como un mes muy desafión. Lo comenzamos con la varicela del peque a 15 días de las vacaciones, con sus correspondientes malabares para estar con él, cubrir las horas que tuve que faltar al trabajo, e ir actualizando el blog. Luego las vacaciones de Navidad; más malabares, aunque en éste caso tuve la suerte de que entre mi padre y mi hermana se pudieron hacer cargo de él. A la vuelta de vacaciones mis padres se fueron de vacaciones, así que de nuevo descontrol logístico, y mamá a la carrera todo el día: de casa al cole a llevar al peque, del cole al trabajo corriendo para no llegar tarde, del trabajo corriendo al cole a recogerlo de nuevo, del cole a casa a comer… y después de toda una tarde de juegos con el peque no te olvides de adecentar un poco la casa y preparar…