Hoy os traigo una colaboración muy especial para mí, pues la ha escrito una de mis comadres.
Ella acaba de comenzar su blog Crackers y Limonada, que os animo a visitar porque hace y comparte cosas chulísimas, y para muestra esta entrada. Hacedme caso y seguidla de cerca, porque su blog promete mucho 😉
Le pedí que se animara a participar en mi especial Navidad escribiendo alguna entrada, y ha sido tan generosa de montar esta increíble casita de galletas y preparar la entrada para este blog. ¡Gracias comadre!
¡Que la disfrutéis!
Hola soy Limonada y junto con mi marido Crackers intentamos vivir una vida maravillosa junto a nuestro pequeño Limón. Hacemos cosas bonitas y vivimos bonitos días. Y de eso va básicamente nuestro blog.
La mejor entrada posible que se puede hacer es por los ojos y después con el estomago.
Por eso he decidido que me conozcáis por una actividad gastronómica, pero siempre relacionada con los peques que es lo que a mi me gusta.
No suelo hacer muchas cosas en la cocina con mi niño, Limón, porque él aun es pequeño y aunque a mi me gusta mucho la repostería, procuro hacer cosas en las que el pueda participar.
Por eso me parece genial la idea de hacer casitas de galletas (generalmente de jengibre), o Gingerbread Houses.

En muchas partes de América son típicas en estas fechas y es una de las tradiciones navideñas que se pueden realizar con peques.
Hay muchas formas de hacerlas:
- Haciendo tú la masa y cortándola para formar las partes de la casa. Aquí nos dan la receta.
- Comprando un kit y pegando y decorando. Como el que de Ikea. Que por el precio merece mucho la pena.
- Y finalmente como la hemos hecho nosotros que es con galletas que teníamos por casa pues mi niño es alérgico a los lácteos y no puede tomar las de Ikea.
La hicimos con estas galletas típicas de Estados Unidos. Pero puede hacerse con cualquier galleta, eso si procurad que sean lo más grandes posibles y que no tengan los bordes dentados.
Hicimos la glasa o lo que es lo mismo el Royal Icing, que es lo que se utiliza de «cemento», para pegar paredes, tejado…
Yo usé esta receta.
Y ya pues las imágenes pueden hablar por si solas.
En pleno montaje de andamios.


Un poco de azucar glass puede ser la nieve
Un bastón de caramelo hace las veces de puerta de entrada con escalón. Y los regalices de picapica de ventanas abiertas de par en par.
Las gominolas le dan más color y ademas así luego tendremos aún más chuches que comer. Ummmm
Y esta es la vista general de lo bonita que puede quedar.
Tenemos unas ganas de comérnosla…. Pero aún esperaremos unos días.

Espero que os haya gustado.
Felices sorbos!!
Conozco la casa de jengibre de IKEA y estuve a nada de comprarla, pero en las islas es casi 4 euros, y no sé yo, que maña tendríamos mi hija y yo en construirla. Pero la que han hecho, está espectacular!
Hola Marta! pues por lo que me cuenta Limonada requiere de paciencia, sobre todo la primera vez… yo espero probar a hacerla, pero haciendo yo las piezas, así que ya te contaré 😉 ¡Un beso guapa!
Pues por lo que me cuenta Limonada es más cuestión de paciencia que de maña… pero bueno si al final hago la mía ya te lo contaré, y a ver si mientras tanto alguien que haya hecho la de ikea nos cuenta qué tal le fue 😉
Madre del amor hermoso! Eso es arte! Para comérselo… pero arte!!